domingo, 8 de octubre de 2017

¿SON LOS RICOS MÁS LISTOS QUE LOS POBRES?




Si el pensamiento mayoritario se fundamentara en principios de empatía y justicia, lo más probable que sucediera sería un mundo en paz y democracia. Pero si lo que realmente sucede se fundamenta en principios contrarios, de egoísmo e insolidaridad social, lo que acaba sucediendo, seguro, es un mundo en permanente estado de guerra y dominación (elitocracia)...luego, ¿es el pensamiento lo que antecede y determina lo que sucede, o es al revés?

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Si, como se dice, siempre ha habido ricos y pobres; si los ricos, siendo minoría siempre han dominado a la mayoría -que son pobres-, todo parece indicar que sí, que los ricos son más listos, además de más fuertes. Pero tiene que haber una razón para que ésto sea así, cuando sabemos que la inteligencia es una capacidad innata, a no ser que su transmisión, como la propiedad, sea por vía hereditaria y al margen de la genética.

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Los pobres compiten en las urnas o se matan en los campos de batalla, mientras los ricos nunca mueren en las guerras y compiten sólo en los mercados. Esto es “lo que sucede” realmente y a las pruebas me remito.

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Sin duda, todas las evidencias favorecen la teoría de que los ricos, si no más inteligentes, sí son mucho, mucho más “listos” que los pobres. Por eso ganan casi siempre y es lo que puede explicar por qué la mayoría de los pobres acaban emulando y asimilando el pensamiento de los ricos; mientras sean pobres, siempre dirán que no quieren “ser” como los ricos, aunque “vivir” como ellos sea la máxima finalidad de sus vidas.

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¿Y si la lucha de clases -el “motor de la historia” que dijera Carlos Marx- hubiera dejado de estar motivada por ideas de justicia y ya sólo se sostiene por sentimientos de envidia?, ¿acaso es que ha habido un momento en la historia humana a partir del cual la idea de Consumo se haya puesto por delante y por encima de la idea de Justicia?, ¿y si así fuera, tienen alguna responsabilidad en ésto los partidos y sindicatos que se hicieron con el control del hoy domesticado movimiento obrero?

5.
Yo creo que lo que acaba sucediendo es lo que imponen los ricos (por la fuerza bruta en origen y después por la costumbre y el adoctrinamiento del Estado). Es un procedimiento tan inteligente como perverso, muy listo, que por las buenas recurre a medios blandos (democracias estatales), pero que tiene en reserva medios más contundentes cuando le hace falta (estados policiales). Son tan listos y poderosos que han logrado implantar su pensamiento en nuestro cerebro, con olvido de todo principio ético y moral, hasta llegar a controlar absolutamente nuestras vidas.

6.
Por eso, el pensamiento libre, pacífico y democrático no puede suceder y, por ahora, sólo puede ser soñado.

DERECHO A DECIDIR: ¿ELITOCRACIA O DEMOCRACIA?





Lo que sucede en el presente condiciona el futuro, que, como todo lo desconocido, siempre será incierto.

Es falso y tramposo un derecho a decidir planteado como elección entre capitalismo (global) y capitalismo (local), entre Estado (monárquico) y Estado (republicano). Es un dilema tan falso como el planteado entre izquierda y derecha, facciones del mismo sistema único y legal.

Si existiera el derecho a decidir, si fuéramos realmente libres, podríamos elegir entre Elitocracia o Democracia, pero eso está muy lejos de ser posible mientras no exista verdadera libertad de conciencia y el derecho a decidir sea ilegal.

Nada sustantivo ha cambiado, ni puede cambiar, en estos convulsos días. La elitocracia (excluyente) gana y la democracia (incluyente) pierde. El derecho a decidir sigue siendo tan subversivo como siempre.

LA OBVIEDAD, LEY DE LEYES




Mundiales, europeos, españoles y catalanes, vecinos y clientes todos: hoy deberíamos estar tranquilos y agradecidos a Caixa Bank y al Banco de Sabadell, que nos están señalando el buen camino.
Todo cuanto existe está en el presente, lo que sucedió en el pasado no existe, lo que pueda suceder en el futuro no existe, sólo existe lo que es. Y lo que es sólo puede ser hoy, ni ayer ni mañana. Si Todo es presente, si éste es mercado y sólo puede ser mercado y si Todo es y sólo puede ser Dios, acabamos de dar con la sagrada y única ley de leyes, la de la suprema ley de la obviedad: el Mercado es Dios.

Y habiendo quedado al descubierto lo obvio, lo que siempre hemos tenido delante de nuestras narices, la verdadera identidad de Dios, ¿a qué viene darle más vueltas?

miércoles, 4 de octubre de 2017

EL REY DE ESPAÑA LO HA DEJADO BIEN CLARO


       Las fuerzas del orden desalojan a los indignados de la plaza de Catalunya, el pasado 27 de mayo.

Como de costumbre, sólo podemos esperar el triunfo de la Razón, que -como bien sabéis- es propiedad del Estado...y la propiedad es sagrada.

 Ayer, el rey dejó bien claro qué es España y quién es él. Al rey de España, como es perfectamente comprensible, no podemos exigirle que piense antes de hablar, porque su misión consiste en leer lo que le escriben. No se le puede pedir otra cosa, porque él es un mandado fiel, un asalariado más al servicio de España, o sea, del Estado. Por fin, el ser de España, tan cuestionado a lo largo de muchos siglos, ayer quedó aclarado por boca del rey, que no dejó espacio para una duda que ya sólo cabe en la cabeza de la gente desinformada que no ve los telediarios de Tve. España ni es, ni puede ser, otra cosa que un Estado; y el Estado (como todo el mundo pudo comprobar el pasado 1-O) tiene siempre la Razón de su parte. Y por eso, como la Banca, siempre gana, no es para menos, siendo España Una, Grande y Libre.

lunes, 2 de octubre de 2017

MALOS DIAGNÓSTICOS CONDUCEN A PEORES CONSECUENCIAS



¿Que es lo que diferencia la presente crisis respecto a las precedentes?

"El capitalismo no es un eterno círculo sino un proceso histórico. Cada gran crisis acontece en un determinado nivel de acumulación y de productividad superiores a los de la crisis anterior" ... "Las crisis anteriores se superaron porque el capitalismo no había alcanzado todavía su máxima expansión. Un espacio interior quedaba aún disponible para el desarrollo del sistema" ... "Sin embargo, tras la 3ª revolución industrial, al capitalismo ya no le queda espacio para una nueva fase real de acumulación" (De una entrevista a Robert Kurz, el 2 de septiembre de 2012)


MALOS DIAGNÓSTICOS CONDUCEN A PEORES CONSECUENCIAS

Hace un mal diagnóstico de la realidad quien ve la actual crisis del Estado separada de la crisis del Capitalismo

En plena globalización las oligarquías han logrado concentrar todo su poder en una estructura aparentemente indestructible, organizada en dos frentes -económico y político-sólo aparentemente separados. Esta “apariencia” de separación funcionó muy bien durante las últimas crisis, gracias al camuflaje socialdemócrata (el Estado de Bienestar), pero a medida que la globalización avanza, su campo de expansión se agota, ya no hay más campo, ya no hay otro planeta ni otra gente a la que explotar para seguir acumulando capital y poder; y alcanzado ese límite, la apariencia de autonomía de lo económico y lo político ya no se sostiene. 
Desde esa lógica sólo cabe esperar una evolución posible, con una estrategia que no puede ser otra que la de una permanente crisis de Estado,  como única forma de salvar la permanente crisis del capitalismo. 

martes, 12 de septiembre de 2017

ESPAÑA, CATALUÑA Y EL TERCER ESTADO

Manifestación nacionalista contra el nacionalismo

 
«El gobierno despótico es un orden de cosas donde el superior es vil y el inferior está envilecido»
Nicolás Chamfort, seudónimo de Nicolas Sébastien-Roch (1741 -1794), moralista francés, lúcido y escéptico, elegido miembro de la Academia Francesa en 1782.


ESPAÑA, CATALUÑA Y EL TERCER ESTADO
Antes de que la modernidad pudiera configurarse como obra del Estado, las mismas élites que alumbraron la ideología estatal, llamaban “estados” a otras cosas. Distinguían tres estados: nobleza, clero y pueblo. Los dos primeros estaban integrados por aquellos individuos que no necesitaban producir nada mientras pudieran vivir del trabajo del tercer estado (el resto de individuos, dedicados a trabajar para sí mismos y para los dos estados “superiores”). Lo que caracterizaba esa división social era, fundamentalmente, la forma en que cada uno de esos estados se ganaba la vida: nobleza y clero no trabajaban, no ganaban su sustento con el trabajo, ni manual ni intelectual, eran “trabajadores” a su modo estatal (esencialmente militar y clerical e, incipientemente, comercial). Su sustento provenía de la renta de tierras expropiadas o heredadas y de los impuestos aportados bajo amenaza de violencia armada. En eso consistía la legalidad constituyente del moderno Estado burgués. Solucionada la primera parte del “sistema” con la legalización de la apropiación privada, la hacienda estatal venía a ocuparse de la segunda parte, mediante los Presupuestos del Estado con los que financiar, mediante impuestos sustraídos al Tercer Estado, las necesidades de los dos primeros estados, así como las crecientes necesidades del aparato legal, burocrático y militar necesario al funcionamiento de los nuevos estados surgidos de la revolución burguesa.